martes, febrero 12, 2008

Bendito cumpleañero

Jime, por si me lees, para que sepa Joaquín.

Benditos los que nacen en febrero,
entre el once y el trece, Dios mediante;
los que suelen llevar la voz “cantante”,
debajo del sombrero.
Los piratas, los magos, los toreros,
los joaquines de versos litigantes,
las niñas del amor, los caminantes
que tienen por hogar, el mundo entero.
Benditos los que cumplen tanto y nueve,
la lluvia del verano, cuando llueve
con gotas inquilinas.
Los juglares de frágil esqueleto
y el son de este soneto
que canta el “japiverdi” de Sabina.

miércoles, febrero 06, 2008

XLI

Bendito el germinar de la ciruela,
los racimos de vid que serán vino,
la lámpara de sueños de Aladino,
el cielo de Cortazar de Rayuela;
la lágrima embebida de mistela,
Don Gato con sus botas del camino,
los que toman a saco su destino
con ansia centinela;
bendito aquel torito del toreo
que escapa de la muerte
a fuerza de empeñarse en la cornada;
el beso del latido y el deseo
de amar, bendita suerte,
con que llevo mi boca embanderada.